UNA VIDA DE ARREPENTIMIENTO Y FE
(Una serie de cuaresma)
(Una serie de cuaresma)
01 Como vivos de entre los muertos (Romanos 6:1-14)
02 Nueva vida bajo nuevo amo (Romanos 6:15-23)
03 Una historia de dos matrimonios (Romanos 7:1-12)
04 La cruda realidad del cristiano (Romanos 7:13-25)
05 Ahora no hay condenación (Romanos 8:1-17)
Una vida de arrepentimiento y fe
La Cuaresma es una época en nuestro calendario litúrgico para recordar la importancia del arrepentimiento y el perdón en la vida de los cristianos. Si bien es cierto que esta práctica está relacionada estrechamente con la iglesia católica, no sólo ella lo practica. Las iglesias Luteranas, anglicanas y algunas otras protestantes la practican. No sabemos con certeza cuándo se empezó a practicar la cuaresma, pero tenemos datos de que la iglesia probablemente la celebraba desde el siglo III o IV d.C.
Por lo tanto, no es una práctica católico romana, es una práctica cristiana. Como iglesia, queremos celebrar la cuaresma porque es una práctica que nos lleva a reflexionar sobre la importancia de la pasión de Cristo Jesús. Si no fuera por su muerte en la cruz, no tendríamos acceso al perdón de Dios, ni podríamos arrepentirnos genuinamente. “Una vida de arrepentimiento y fe” es una serie que nos invita a reflexionar en cómo debe ser la vida del creyente a la luz de la salvación que Dios nos ha dado.
Pasando a través de los capitulos 6 al 8 de Romanos veremos la tensión en la que vive todo creyente. Como Jesús nos salvó, no deberíamos vivir más en pecado (cap. 6). Pero como somos pecadores, cuando conocemos la ley, en vez de dejar de pecar, pecamos más ¿Cómo seremos salvos de este estilo de vida (cap. 7)?.¡Gracias a Dios por el Espíritu Santo, que nos guía a vivir en la verdad y nos asegura el amor de Dios (cap. 8).
Pasando a través de estos pasajes, esperamos que como iglesia podamos descansar en la obra de Jesús y del Espíritu Santo. Esto nos llevaría a una vida de arrepentimiento y fe. Arrepentimiento de nuestros pecados, fe en que somos perdonados y capacitados para vivir para Dios, guiados por el Espíritu Santo. ¡Acompañanos!